Esta página web utiliza cookies técnicas y de análisis necesarias.
Al continuar navegando por esta web usted acepta el uso de cookies.

Grandes Maestros del Diseño Gráfico Italiano del Siglo XX

GRANDES MAESTROS DEL DISEÑO GRÁFICO ITALIANO DEL SIGLO XX

En el marco del ciclo de charlas «Chile habals obre Italia» AIEP, la Biblioteca Naciona de Chile, el IIC Santiago y AIEP presentan la exposición «Grandes Maestros del DIseño Gráfico Italiano del Siglo XX» donde aparecen artistas que marcarían la historia del diseño en la península y en el mundo: el poeta futurista Marinetti, con poesía tipográfica que influye en una época en la que Europa se estremecía, a principios del siglo XX; Depero con sus dibujos y maquetas, los que fueron tomados en cuenta posteriormente por Alessandro Mendini y Ettore Sottsass; Armando Testa, quien impactó con sus afiches publicitarios para Pirelli; Munari, quien tomó el diseño, la literatura, la poesía y el arte como base para su trabajo; Grignani que llevaría el Op Art al mercado con su inolvidable sello para la industria de la lana; Pintori, quien logró posicionar la marca Olivetti; Fiorucci, quien revolucionó la identidad de la moda de los años ochentas alrededor del mundo.
Éstos son sólo algunos ejemplos donde se aprecia la relevancia y protagonismo que el diseño gráfico italiano ha tenido a lo largo de la historia.
La presente exposición fue realizada por AIEP, en conjunto con la Nuova Accademia di Belle Arti (NABA) de Milán, Italia y el Instituto Italiano de Cultura.

1. Leonetto Cappiello (1875 – 1942)
Considerado el padre de la publicidad moderna, Leonetto Cappiello pasó su vida en París, donde trabajó como diseñador de afiches. Inicialmente, su mayor influencia fue Jules Cheret, pintor y litógrafo francés, pero prontamente desarrolló un claro estilo propio, donde su mayor sello artístico fue el uso extenso de figuras estallando en un fondo negro.
Fue el primero en inventar y utilizar personajes en la publicidad. Algunos de los ejemplos más memorables fueron su Arlecchino o su cebra anaranjada, las que se popularizaron a tal punto que quedaron asociadas al producto para siempre y se convirtieron en un punto de referencia en la publicidad moderna.

2. Fortunato Depero (1892 – 1960)
Pintor asociado al movimiento futurista, además escritor, escultor y diseñador gráfico. Su principal fuente de inspiración fueron las vanguardias europeas y los escritos de Marinetti.
En 1915, escribió junto a Giacomo Balla, Ricostruzione futurista dell’universo (La reconstrucción futurista del universo). Este escrito proponía una expansión de las ideas introducidas por otros futuristas, ligándolas a la vida cotidiana. En 1919, fundó la “Casa d’Arte Futurista” en Rovereto, la cual se especializó en la producción de juguetes, tapicería, mobiliario, carteles y diseño gráfico.
Posteriormente en 1928, se trasladó a Nueva York, donde diseñó portadas de revistas como The New Yorker y Vogue. Realizó también trabajos para la tienda Macy. En 1930, de vuelta en Italia, continuó trabajando y fundó la revista Dínamo. Finalmente en el año 1949, regresó a Rovereto, donde trabajó hasta su muerte.

3. Elio Fiorucci (1935 – 2015)
El diseñador Elio Fiorucci es el creador de una de las más potentes e identificables marcas de moda, la que fue fundada en 1967. Su primera tienda abrió en Milán y los primeros productos trabajados fueron ropa y accesorios. Desde su inicio comenzó una revolución comunicacional relacionada a los productos, la cual contradijo cualquier sistema riguroso de identidad.
Sus influencias al comienzo estuvieron ligadas a la cultura alternativa de Inglaterra y Estados Unidos. En pocos años su marca se globalizó, convirtiéndose en un ícono capaz de atraer personalidades como Andy Warhol y Madonna.

4. Franco Grignani (1908 – 1999)
Diseñador, pintor y arquitecto, Grignani participó en la segunda fase del futurismo. Poco después, llamó su atención la abstracción geométrica y el constructivismo.
Uno de sus principales intereses fueron las investigaciones ópticas, las cuales desarrolló en la pintura, en fotomontaje y diferentes técnicas fotográficas. También experimentó con la distorsión de imágenes, en plástico y en formas dinámicas (rotación, perspectiva oblicua, perspectiva falsa).

5. Filippo Tomaso Marinetti (1876 – 1944)
En el fervor de su pensamiento futurista, el poeta Filippo Marinetti cuestionó las innovaciones formales. Para el artista italiano, la utilización de la página del libro como soporte de composición visual, no logra vencer el estatismo de la linealidad de la escritura. Como respuesta, propone una verdadera desestructuración del texto impreso.
“El libro futurista –declara– debe ser la expresión de nuestro pensamiento futurista. Y no sólo eso. Mi revolución se dirige a la llamada armonía tipográfica de la página, que se opone al flujo y reflujo, a los saltos y estallidos del estilo que la unifica. De esta manera, en la misma página utilizaremos tres o cuatro colores de tinta, e incluso 20 modelos diferentes de tipografía, si fuera necesario. Por ejemplo, itálica para una serie de sensaciones uniformes o rápidas, negrita para onomatopeyas violentas, y así sucesivamente”. Con esta revolución tipográfica y esta variedad multicolor de las letras buscó redoblar la fuerza expresiva de las palabras.
La revolución tipográfica de Marinetti no conforma exclusivamente una novedad formal. Más bien, su concordancia con los aspectos semánticos del texto que apunta directamente a ampliar los niveles de lectura.

6. Bruno Munari (1907 – 1998)
Pintor, escultor, artista gráfico, diseñador industrial y autor de libros para niños. Comenzó su actividad adhiriéndose al segundo futurismo. En 1948 fundó con Gillo Dorfles, Gianni Monnet y Atanasio Soldati, Movimento Arte Concreta (Movimiento de Arte Concreto).
Su escultura (objetos inútiles, móviles) como también sus artísticos libros y sus trabajos de diseño gráfico, fueron influenciados por el movimiento Dadá y por el Surrealismo tardío.
En el campo del diseño gráfico hizo una importante contribución a la imagen corporativa de la editorial Einaudi.
En el año 1960 diseñó el famoso poster de Campari utilizando todos los logotipos de la compañía.

7. Giovanni Pintori (1912 -1999)
Giovanni Pintori fue el diseñador de la marca Olivetti por más de 20 años. Sus posters y avisos publicitarios lo caracterizaron por tener un sinfín de soluciones visuales y variaciones continuas e innovadoras.
Su obra se inspiró en los engranajes y los detalles internos de las máquinas de escribir, así como la escritura y el cálculo, a veces representados de una manera surrealista y poética. El trazo gráfico es sintético, a veces geométrico, pero también pictórico.

8. Albe Steiner (1913 –1974)
Considerado uno de los más importantes e influyentes diseñadores gráficos de los años 50 y 60, Albe Steiner desarrolló una búsqueda basada en la estética visual clara y legible, que a su vez se alejaba de toda clase de formalismos. Con un fuerte interés en la pintura, la fotografía y el trabajo de vanguardia, se destacó por colaborar con el Estudio Boggeri en Milán, donde se desempeñó como diseñador gráfico.
Desde 1946 a 1948 estuvo en México colaborando con el “Taller de Gráfica Popular”, un colectivo de artistas de la impresión.
Su desarrollo laboral continuó en el campo del diseño editorial, en el Politécnico de Milán, dirigido por Elio Vittorini, donde introdujo una innovadora diagramación de página. Este diseño fue inspirado por el constructivismo ruso.
Además realizó actividades pedagógicas en la escuela Rinascita, trabajó en muchas revistas italianas como Domus, para el periódico LeftWing e importantes editoriales como Feltrinelli, Einaudi y Zanichelli. Tuvo, también, un importante rol como diseñador en las compañías Pirelli y Olivetti.
Durante los años 50, se convirtió en el director de la “Scuola Umanitaria del Libro”.

9. Armando Testa (1917 –1992)
Pintor, diseñador gráfico, dibujante y autor de importantes campañas de publicidad, Armando Testa es considerado uno de los artistas más importantes de la publicidad italiana. Nacido en Turín, asistió a una Escuela Tipográfica. Prontamente se sintió atraído por el mundo del arte moderno.
Después de la Segunda Guerra Mundial, trabajó para importantes empresas como Martini & Rossi, Carpano, Borsalino y Pirelli. También se desempeñó como ilustrador de periódicos y revistas.
En 1956 inauguró “Studio Testa” dedicado a la publicidad y también a la industria de la televisión. Testa fue quien trajo a la vida a emblemáticos personajes publicitarios como Antonetto, Punt e Mes y Café Paulista de Lavazza.

  • Organizado por: AIEP
  • En colaboración con: IIC Santiago, Biblioteca Nacionañ